[PROYECTO OCCULTUS] N°6: El Centinela Oculto

Proyecto Occultus | N°6: El Centinela Oculto.

Máximo Grey un día recibe en su casa una carta informando de un funeral, su amigo de la infancia Damian había muerto. Grey se considera un hombre amante del empirismo, lo que ve y siente lo considera real, por ello su total rechazo en ser parte de alguna religión, aunque siempre ha respetado el amor que algunas personas sienten hacia esta. Es una persona intelectualmente rica pero también es visto por muchos como un ser odioso y arrogante. Damian era todo lo contrario, una buena persona, creyente en Dios y no le molestaba ayudar a los demás, por esto Máximo lo consideraba su mejor amigo, en el fondo creía que con él podría aprender hacer una mejor persona.

Al día siguiente, Máximo se dirige al funeral del que una vez fue su mejor amigo. Si existe algo que él odie son los funerales, en otro momento hubiera sacado alguna excusa para no asistir pero esta vez fue la excepción. Damian fue el hermano que nunca tuvo, le enseño que debía ayudar a las personas sin esperar nada a cambio, pero lo que más recordaba era su idea de las personas: “Todos somos buenos sin importar el dinero o la educación”.

Lo último que Grey conoció de su amigo fue que se encontraba de viaje. La carta menciona que se desconocen las causas de su muerte, si asiste al funeral podrá obtener alguna información de la misteriosa muerte de su amigo. Es muy extraño que un simple viaje turístico termine en tragedia, él sabía que Damian era un hombre que no se metía problemas.

Cuando Máximo Grey entra a la funeraria una sensación extraña recorre su cuerpo, es algo que nunca había experimentado en toda su vida, era como si sintiera que no era bienvenido allí. En un instante pensó en no entrar pero no halló una razón alguna para no hacerlo, así que siguió caminando.

Al entrar observa flores, personas vestidas de negro y un ataúd en la mitad, absolutamente todo lo que se puede esperar de un funeral. Sé dirige hablar con sus padres, una pareja que siempre vio con buenos ojos la amistad entre Máximo y Damian. Al preguntar a sus padres la posible causa de muerte de su amigo, estos no dieron una respuesta concreta, solo sabían que su hijo estaba de viaje por Europa con un grupo religioso; cuentan sus amigos que cuando se encontraban en una expedición en los bosques de Rusia, este de repente cayó al suelo completamente pálido y sin signos vitales; la autopsia no pudo determinar la causa. Sin embargo los padres de Damian estaban muy tranquilos pues estaban convencidos de que su hijo se encontraba en el cielo con Dios.

Luego de ofrecer las respectivas condolencias a la familia del difunto, Máximo se dirigió al ataúd para despedirse del que ha sido su único y verdadero amigo, mientras en el fondo escuchaba un grupo de personas orando en voz alta. De pie a un lado del ataúd, decidió escuchar atentamente al grupo de oración, algo estaba sucediendo con ellos, una mujer comenzó a escucharse de una forma extraña, su voz parecía estar alterada, pasó de ser dulce y melódica a grave y desgarradora, hablaba en una lengua extraña que jamás había escuchado. Algunos rieron, otros creyeron que se trataba de una broma pesada pero las suposiciones quedaron atrás cuando la mujer cayó al suelo temblando de una forma violenta como si estuviera siendo torturada en el mismísimo infierno, su voz continuaba siendo extraña, sus gritos y lamentos fueron aumentando hasta que cesaron definitivamente. Asustados en el recinto, algunos de los presentes llevaron a la mujer a un hospital. Los niños que se encontraban en el recinto fueron desalojados de la funeraria por orden de la familia de Damian. Todo fue tan bizarro y tenebroso como una escena de terror, esto llego a incomodar a Máximo, un hombre que no cree en fenómenos extraños.

Con el ambiente menos tenso Grey se despide para regresar a su hogar, pero en ese instante la madre de Damian toma su mano y le pide que no los abandone en ese instante. Máximo deseaba huir de ese lugar, pero sabía que no podría fallarle a la familia de su mejor amigo. El extraño suceso con la mujer dejo al grupo de oración incompleto para continuar con la actividad, entonces pidieron a Máximo unirse, y aunque es un hombre que no cree en religiones por respeto acepto la oferta. Por su completa ignorancia en el tema, le fueron indicados algunos pasajes de la biblia, el objetivo era leerlos para a las personas del recinto.

En voz alta, Máximo leía los pasajes de la biblia, las personas presentes se mostraban atentas y reflexivas a las palabras, exceptuando a dos personas, dos mujeres. Estas aparecieron de repente en el recinto, nunca se dejaron ver cuando Máximo entró a la funeraria y mucho menos cuando la mujer del grupo de oración enloqueció. La extraña presencia lo incomodaba, pero parecía incomodarlo solo a él, a pesar de demostrar un comportamiento burlesco a la situación y una vestimenta inapropiada para el momento parecía que estas dos mujeres no molestaban a las personas presentes. El atractivo de las mujeres llamaban su atención, pero una mirada al ataúd le recordó que no era lugar ni momento para pensar en el sexo femenino. En ese momento las dos mujeres comienzan a cantar, sus voces hipnotizaban, Máximo Grey comenzaba a sentir sus ojos pesados mientras observaba que las mujeres misteriosas se acercaban más y más hacia él, sus esfuerzos por resistir aquella extraña sensación fueron inútiles hasta que vio el rostro de las dos mujeres envuelto en llamas, una imagen terrorífica que lo saco del indescriptible estado de hipnosis. Ahora en estado alerta, el canto había cesado y las mujeres habían desaparecido.

Luego de padecer el tan extraño suceso con las dos mujeres, Máximo salió a tomar aire por la puerta trasera del establecimiento. En el exterior, se halló en un oscuro y estrecho callejón, parecía un lugar tranquilo para recuperar las energías, pero al girar su vista al acceso de la calle observar algo escalofriante, las dos hermosas mujeres se encontraban allí. Estas al percatarse de su presencia inician de nuevo su tenebroso canto e inician una lenta caminata para acercarse a un Máximo atrapado entre ellas y la pared. Pero los miedos de Máximo Grey se intensifican cuando vuelve a observar sus rostros envueltos en llamas además de otros cambios, sus cuerpos se alargaban, la ropa se quemaba dejándolas desnudas exponiendo una piel color escarlata con signos de tortura, presentaban unas estructuras anatómicas en su espalda como alas y los pies se mostraban envueltos en una mezcla entre fuego y humo, la lógica en ese instante era inútil para entender lo que sucedía, estos seres misteriosos eran demonios.

Máximo desconocía a qué se enfrentaba, en su poco conocimiento solo estaba seguro de que trataba con un fenómeno paranormal que podía ver, sentir y oír.

Victoria es una mujer creyente en la religión que ha estado en una relación sentimental con Máximo Grey por 3 años, por respeto ella no intenta convencer a su amado de la existencia de Dios, aunque a veces le habla un poco de la biblia para que este muestre algo de interés en su religión. En esas historias de ‘ciencia ficción’ como dice Máximo, recuerda una en particular que habla de una gran bestia de color escarlata, con siete cabezas y diez cuernos, y una mujer conocida como “La gran ramera” que cabalga a esta abominación en el apocalipsis. Las dos mujeres a pesar de su belleza vestían como prostitutas baratas, este antecedente y otros detalles lo hicieron preguntarse: “¿son estas las rameras del libro?”, “¿Tienen alguna relación con la bestia que se nombra, por ese característico color escarlata?”; mientras en su mente intenta buscar alguna respuesta a sus dudas en el callejón los demonios se acercan peligrosamente a su persona.

En una de sus numerosas conversaciones con Victoria, Máximo recuerda un obsequio que su amada le entrego en su primer aniversario, una hoja con un escrito de la biblia.

–El SALMO 91 es una oración de protección contra fuerzas oscuras. –Decía Victoria.

–Sé que no crees en estas cosas pero mantenlo cerca de ti siempre, úsalo cuando creas que sea necesario. –insistía su amada.

La suerte le sonríe a Máximo cuando este recuerda que traía consigo el regalo de su amada en su billetera. Con prisa encontró el papel y en voz alta leyó la oración de protección, pero esta parecía no funcionar al observar que no detenía a los demonios. Estos se encontraban tan cerca que uno de ellos al estirar sus horripilantes brazos empuja a Máximo Grey al suelo, inmediatamente con sus desagradables manos intenta presionar la cabeza del hombre indefenso y asustado, un toque leve y de poca duración, pero una experiencia igual a una eternidad quemándose. El infernal dolor que sentía Máximo no era lo único que percibía, la voz del demonio también podía escuchar.

–Tu destino es el mismo de Damian, Máximo Grey debe morir, morir en nuestras manos. Tu alma se quema lentamente. Pronto serás uno de nosotros. –Escuchaba Máximo.

Pensando en el terrible sufrimiento que había pasado su amigo Damian a manos de los demonios, Máximo se pone de pie, mira fijamente los ojos del demonio y reinicia con la lectura. Esta vez su voz no era débil, ni miedosa sino fuerte y poderosa. Máximo Grey ya no siente ningún miedo y no duda en acercarse a los demonios para enfrentarlos, en ese instante una especie de energía rodea su cuerpo, aquella energía es tan poderosa que hace retroceder a los seres oscuros, entonces Grey escucha una voz, era la madre de Damian.

– ¡MÁXIMO! Destruye a esas malditas abominaciones, no dejes que escapen, devuélvelas al infierno. –gritaba la madre de Damian. Entonces, la mujer con todas sus fuerzas le arroja un sable a Máximo.

Máximo conoció a Damian en el club de esgrima de la familia Grey. Antes de ser buenos amigos eran rivales, fueron conocidos como los mejores esgrimistas del club, siempre viéndose las caras en las finales de numerosas competiciones. Un día decidieron enfrentarse a escondidas y sin protección para confirmar quien era el mejor, Máximo escogió la espada y Damian su favorito el sable. El enfrentamiento deja a los dos jóvenes con heridas en sus cuerpos, el último movimiento que le da la victoria a Máximo hiere en el pecho a Damian, un ataque peligroso recordando que no tenían ninguna protección. La herida pudo ser mortal pero para fortuna de ambos no lo fue así, por lo tanto un arrepentido Máximo pide el perdón de su rival para que no lo acuse, con lo cual Damian responde con unas palabras que nunca olvidara: –No te preocupes, sé que no tienes la intención de hacerme daño, eres una buena persona y un respetable rival, Máximo Grey. En ese momento se convirtieron en amigos, guardando el secreto de un acto que podía haberles costado la expulsión del club.

Con el arma en sus manos, Máximo observa que esa misteriosa energía que lo rodeaba ahora también cubría al sable, en ese momento se convertía en el único portador de una herramienta de agresión capaz de utilizar en contra de los demonios. El demonio del infernal toque al observar que su rival se convierte en una amenaza decide cambiar de objetivo y ataca a la madre de Damian, este se acerca a una velocidad impresionante a su próxima víctima pero la agilidad de Grey termina siendo superlativa y mutila con un solo movimiento los horrorosos brazos del malvado ser, seguido de un ataque tan fuerte y poderoso que deja partido a la mitad al ente oscuro. Inmediatamente Máximo voltea su mirada a su próximo rival, el segundo demonio. Este se mostraba asustado, se encontraba en una situación desconocida, nunca se había enfrentado a u humano que destruía demonios. Sin embargo para enfrentarse al humano, el segundo demonio deja crecer unas filosas garras de sus manos.

–Hoy morirás, Máximo Grey. –dijo el demonio.

–Hoy no, imbécil. –Le respondió Grey.

Entonces un enfrentamiento entre hombre y demonio inicia. Las afiladas garras del demonio amenazan con cortar mortalmente a Grey, pero la agilidad de este evita que suceda. El ente oscuro luce desesperado y con todas sus fuerzas intenta hacerle daño a Máximo pero este solo elude sus ataques y contraataca con gran efectividad al demonio causándole múltiples heridas. Sacando provecho de su ventaja, Máximo Grey acaba con su rival cortándole las manos y atravesando el sable en el pecho del demonio.

–No somos los únicos, vendrán más por ti. –dijo el demonio debilitado.

– ¡Que vengan! Máximo Grey los espera. –dijo Máximo, mientras retira el sable del pecho del demonio, y con un ataque veloz decapita a la bestia. Acabando así con su enemigo de una vez por todas.

Máximo había ganado el enfrentamiento contra unas criaturas desconocidas hasta ese momento. Los restos demoniacos que se hallaban en el suelo, se convierten en humo y desaparecen, la historia de estos dos seres oscuros en la tierra ha terminado, pero todo indica que la de Máximo Grey inicia.

Tiempo después del enfrentamiento Máximo vuelve a reunirse con la madre de Damian, así conoce la verdadera historia de su amigo. Damian poseía el poder de expulsar seres malvados de las personas y se encontraba en Europa realizando exorcismos. En la gira por el viejo continente recibieron un llamado desde Rusia, en los bosques hallaron un niño poseído que necesitaba ayuda urgentemente, allí el exorcismo fracasa y en su último intento logra expulsarlos del niño pero estos toman posesión del exorcista quitándole la vida. La familia de Damian hace parte de Los Centinelas Oscuros, una organización secreta compuesta por personas con dones extraordinarios relacionados con lo paranormal, su objetivo es destruir y cazar cualquier ser ligado al mal, para cumplir esta tarea los Centinelas viajan por todo el mundo. Aquel grupo de oración que se encontraba en el funeral de Damian eran Centinelas intentando expulsar los demonios del cuerpo.

– ¿Las oraciones que leí despertaron mis poderes? ¿Existe Dios? –preguntaba insistentemente Máximo a la madre de Damian.

– ¿De verdad crees que unas simples palabras pueden derrotar a un demonio? En cuanto a Dios sinceramente no sabemos si exista, lo único de lo que estamos seguros es que el mal existe en miles de formas y es nuestro deber eliminarlo para evitar la destrucción de la humanidad. –respondió la mujer.

Para poder controlar sus dones, muchos pasan años practicando, pero Máximo en un solo día controla sus nuevas habilidades, en su afán de buscar la verdad logra detectar a los demonios atormentando el alma de Damian para luego destruirlos con el sable de su amigo. Por este magnífico acto Los Centinelas Oscuros invitan a Máximo Grey para ser parte de la organización. Durante años, buscaron un humano capaz de poder detectar y destruir demonios. El talentoso humano se encontraba cerca de los Centinelas, ocultándose durante años sin querer, por esto Máximo Grey es conocido como “El Centinela Oculto”, un Centinela que terminara siendo temido y respetado por buenos y malos.

Un nuevo mundo lleno de seres malvados, poderes extraordinarios y lugares oscuros descubrirá Máximo Grey con Los Centinelas Ocultos. Los temibles demonios son solo la punta del iceberg de lo que tendrá que enfrentar El Centinela Oculto.

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