Pienso que la moral de las personas de una sociedad se puede
observar en cómo trata a sus animales. Para nadie es un secreto que Colombia ha
mejorado (y empeorado) en algunas cosas entre ellas las leyes contra el
maltrato animal. Nuestro deber como humanos es convertirnos en seres que
respeten a todas las formas de vida, debemos erradicar las actitudes y acciones
que dañan a los animales. Siempre lo he dicho, los animales pueden llegar hacer
mejores seres vivos que nosotros pues ellos no destruyen, ni contaminan al
planeta.
En algunas partes del mundo como es el caso de Colombia hay
vehículos de tracción animal conocidos como “Zorras” que transportan diferentes
materiales como escombros, una actividad que podría ser rentable para algunas
personas pero que por desgracia es tortuosa para los caballos. Este tipo de
vehículos puede ser beneficioso para el planeta, pues no produce contaminación
(aunque las heces pueden ser un problema sino se manejan bien), no necesita de
combustibles, solo de cariño y buen trato al caballo.
El problema con estos vehículos de tracción animal es el maltrato por parte de los dueños hacia los caballos. En Bogotá, la capital de Colombia se observan cientos de estos vehículos con caballos desnutridos y enfermos, lo cual es terrible para una ciudad que planea crecer en todos los aspectos. Puede causar impotencia observar en las calles a caballos que son azotados brutalmente en varias ocasiones por sus dueños, llevando cosas extremadamente pesadas para su capacidad y lo más triste es que sus irresponsables dueños no sufren ningún castigo por parte de las autoridades.
Con el tiempo ha mejorado la vigilancia por el cuidado a los
animales en nuestro país por parte de las autoridades, pero no es suficiente
pues son miles los caballos que viven en condiciones lamentables y siguen
siendo maltratados. Por esto pienso que es necesario para el país que se
prohíba el uso de vehículos de tracción animal reemplazándolo por algún otro
tipo de vehículo que pueda ser útil para las personas que se beneficien de las
carretas. En la ciudad de Bogotá hace tiempo se viene planteando esta
alternativa, pero la ineptitud de las alcaldías pasadas ha sido un obstáculo
para que sea exitosa.
Pienso que en Colombia hemos sido muy lentos, la ley debe
ser clara los vehículos motorizados que cumplen la misma función de las
“zorras” deben ser obligatorios y las personas deben adaptarse y modernizarse
quieran o no. El cambio es definitivo y mucho tiempo se les ha dado a los
usuarios de las “zorras” para cambiar su vehículo, por lo tanto no hay excusa
para que estas personas quieran obstaculizar el proceso, es hora de que
aquellas detestables escenas de maltrato animal en las calles sean cosa del
pasado. Pero es mucho más importante que los pobres
caballos que han sidos explotados puedan retirarse de las calles para siempre,
y que las cabalgatas en las calles sean de exhibición y no de tortura.
¡SALUDOS A TODOS!
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